Historia

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Vista de la ciudadExisten diversas hipótesis sobre el origen del municipio de Catral. Cerca de la localidad se han encontrado restos de origen íbero y el nombre de la población se cree que puede provenir del término "CASTRUM", de origen romano, que haría referencia a un campamento fortificado. Sin embargo, el verdadero asentamiento estable proviene del siglo XI.

Jaime I conquistó definitivamente esta zona a los árabes, cediéndosela a Alfonso X el Sabio que la entregó a los señores de Vizcaya. Posteriormente fue cedida a la Orden de Santiago que poco tiempo después renunció a Catral, quedando la localidad sujeta a la ciudad de Orihuela.

Tras la Guerra de Sucesión, en 1741, y debido al apoyo del municipio a la dinastía de los Borbones, Felipe V les concedió los honores de Villa. A partir de entonces el pueblo experimentó un crecimiento constante debido a la ampliación de territorios por la desecación de los marjales colindantes.

La población cuenta con 4.881 habitantes. Debido a la proximidad del Parque Natural del Hondo, que linda con el municipio por el noroeste, éste es un importante núcleo de asentamiento de gran variedad de aves, patos colorados, flamencos, garzas, etc., y de peces como el fartet, endemico de la Comunidad Valenciana. Las especies vegetales están representadas por los carrizos, juncos, eucaliptos, etc., que son característicos de la zona de marjal y se encuentran por los caminos y senderos que salpican la extensa área de huerta.

Patrimonio histórico:

El Templo Parroquial tiene su origen en los tiempos de la ocupación árabe. A lo largo de los siglos sufre una serie de reedificaciones, siendo una de ellas, la de 1767, la que lo convierte en una iglesia de Cruz Latina y de estilo Neoclásico. Durante la Guerra Civil, sufrió destrozos perdiendo muchas obras de valor artístico.

El fondo de las naves es blanco con cornisas y columnas. Los arcos y bóvedas de líneas clásicas y sencillas están solapados con unas líneas doradas, igual que los capiteles. Posee tres capillas anexas a la nave principal, y se conservan importantes piezas de arte, como la reja que cierra la entrada de la Capilla de la Comunión, de hierro forjado perteneciente al siglo XVI. La talla de San Juan Bautista, atribuida a la escuela de Salzillo, que data del siglo XVIII, y la imagen del Sagrado Corazón de Jesús, del siglo XIX.

La ermita de la Purísima, patrona de la Villa, es otra construcción interesante cercana al Templo.

El municipio cuenta con otro edificio religioso, la Ermita de Santa Águeda, pequeña construcción de estilo contemporáneo que alberga la imagen de la Santa, custodiada según la tradición por la familia Ñíguez.

El patrimonio arquitectónico de casas rurales es muy abundante. Al ser una zona de producción agrícola predominan las casas labriegas, diseminadas por toda la huerta, destinadas a guardar los aperos de labranza y en algunos casos como vivienda particular.

A destacar "Villa Dolores", situada en el camino que va en dirección a la Ermita de Santa Águeda, antigua casa grande de huerta.

Patrimonio cultural:

En Catral se creó la cofradía del Rosario en el año 1654, y se ha mantenido hasta la actualidad. Desde entonces data la tradición del Rosario de la Aurora, que se celebra en octubre, ya que ellos fueron sus impulsores, al igual que lo han sido de que otros pueblos de la Comarca que la habían perdido la recuperen.

El 24 de junio se celebran las fiestas patronales en honor a San Juan Bautista, con diversos actos tradicionales, junto a los que se organizan "Moros y Cristianos", fiesta que va arraigando poco a poco, con desfiles de personajes y escenificaciones.

Los orígenes de la Romería de Santa Águeda se remontan a finales del siglo XVIII, cuando se encontró en el templo la imagen de la Santa. Se celebra el 5 de febrero y atrae a la población de la Comarca y de fuera. Los principales actos son: misa, procesión, juegos, pasacalles, etc., pero lo más característico es la venta de turrón y dulces que se elaboran para ese día.