Cofradías

Cristo de La Agonía

Cristo de La Agonía

Esta Cofradía se agrupa en torno a una magnífica talla de Cristo Crucificado, agonizante y coronado de espinas, que tradicionalmente ocupó la capilla izquierda, llamada del confesionario, y situada en la misma línea que el altar mayor de la Iglesia parroquial. La imagen llegó a la parroquia alrededor de 1955-56 y se costeó con donativos de los feligreses más la recaudación popular conseguida a base de rifas, representación de teatro o escenografías variadas. La ceremonia de acogida partió de la finca La Zenia y desde aquí se le trasladó a hombros al templo parroquial.

La Hermandad desfila en la procesión del Silencio, el Jueves Santo, y en la del Santo Entierro, el Viernes Santo.

En este año 2008, como novedad se estrena el nuevo Trono que fue bendecido el jueves 13 de marzo de 2008.

Los Cofrades desfilan portando grandes velones de cera, según la antigua usanza, y llevan como distintivo un crucifijo sobre el pecho y corbata granate, los hombres. Les caracteriza la sobriedad y los colores negro y granate.

Precede al paso a modo de estandarte un gran crucifijo con tul blanco.




Cristo de La Agonía

AL CRISTO DE LA AGONÍA

En esta tarde, Cristo del Calvario, vine
a rogarte por mi carne enferma; pero al verte, mis ojos van y vienen
de tu cuerpo a mi cuerpo con vergüenza.

¿Cómo quejarme de mis pies cansados,
cuando veo los tuyos destrozados?
¿Cómo mostrarte mis manos vacías, cuando las tuyas están llenas de heridas?

¿Cómo explicarte a tí mi soledad,
cuando en la cruz alzado y solo estás?
¿Cómo explicarte que tengo amor,
cuando tienes rasgado el corazón?

Ahora ya no me acuerdo de nada,
huyeron de mí todas mis dolencias.
El ímpetu del ruego que traía
se me ahoga en la boca pedigüeña.

Y sólo pido no pedirte nada,
estar aquí, junto a tu imagen muerta,
ir aprendiendo que el dolor es la llave
santa de tu santa puerta. Amén.

Gabriela Mistral